Y para variar mas burlas...

Don Quijote se fue a dormir, entonces quede yo la Duquesa y las doncellas, estabamos hablando. Cuando la Duquesa me pregunta sobre Dulcinea, yo le dije que yo en realidad nunca la he visto y que en realidad es practicamente inventada, que le tuve que mentir a don Quijote multiples veces sobre la existencia de Dulcinea; como cuando estaban aquellas tres doncellas y yo le dije que la de en medio era Dulcinea. La Duquesa me dijo que en realidad yo no menti, que esa doncella de verdad era Dulcinea, obviamente yo no iba a poner en duda lo que ella me dijo por que uno se imaginaria que una Duquesa no mentiria de esa forma. Ya despues de que yo me retire a dormir, la Duquesa y sus doncellas platicaron de como nos practicarian la broma mas grande jamas vista a mi y a don Quijote, obviamente en ese momento yo no crei que nos fueran a hacer eso por que uno jamas se imaginaria que personas como los Duques harian tales hechos.

Mas bromas...

Don Quijote indignado por el trato que estaba recibiendo de parte del cura, este le respondio con un discurso muy de caballeros, hasta yo estaba sorprendido y honestamente me quede impactado y hasta interesado en llegar a hablar asi algun dia. Despues el cura la agarro contra a mi y me dijo que me citara a mi mismo, para ver si asi demostraba que era yo y no un impostor. El Duque me volvio y a ver y me dijo que el me daria el mandado de una isla de su propiedad, yo no podia contener mi alegria obviamente, pero en ese momento no sabia que todo era una burla. Despues de todo el cura le comento a los Duques que el no se iria hasta que nosotros nos fueramos, posiblemente todo esto para mantenernos vigilados. LLegaron unas doncellas a lavarle la cara a don Quijote, curiosamente se quedaron sin agua y se comenzaron a reir, se notaba que era una broma pero ellos para disimularlo decidieron que se la lavarian tambien para no hacerlo tan obvio. Don Quijote y la Duquesa se retiraron de la mesa, en ese momento la Duquesa decidio preguntarle a don Quijote si Dulcinea era de verdad o solo una ilusion de el, don Quijote le respondio de manera muy apropiada diciendole que no era apropiado decirlo en este momento.

Tomandole el pelo...

Llegamos a la venta y yo note que el Duque y la Duquesa se habian adelantado, lo mas seguro para hablar con los criados de las visitas que eramos nosotros. Entramos y mientras ibamos caminando por al venta nos dabamos cuenta de que don Quijote recibia un trato diferente a un visitante comun. A don Quijote lo atienden, lo alistan para la cena, llegamos a la hora de la cena y don Quijote y el Duque se pelean por quien debia presidir la mesa, finalmente dejan a don Quijote. Pero yo empeze a contar una historia algo humillante para don Quijote, por dicha la Duquesa le pregunto a don Quijote sobre Dulcinea justo a tiempo para que el no me regañara todo. Finalmente el cura que nos acompañaba en la mesa, reconocio a don Quijote y al parecer ya conocia la fama de don Quijote de sus locuras y grandes confusiones. Por eso mismo lo empezo a insultar y decirle que lo mejor era que se fuera que no tenia nada que hacer aqui.